Andrés Hernández y Alberto Dogart.
Información Obrera núm. 59, julio de 1985.
En la calle de electricistas esquina con requisa encontramos a un grupo de trabajadores de TELMEX que acaloradamente discutían el camino a seguir en la lucha que actualmente entablan contra la empresa, interesados en la discusión nos acercamos para enterarnos del contenido de su lucha a lo cual uno de los compañeros apodado el diodo relató lo siguiente.
TELMEX como parte de su política de digitalización del servicio telefónico niega el derecho a la capacitación a 600 trabajadores del departamento de conmutadores lo cual significa la pérdida del conocimiento y el control sobre nuestra materia de trabajo, la que la empresa otorga por medio de contratismo a empresas privadas y trasnacionales como Mitel, Indetel, etc.
Antecedentes del conflicto.
Ya en gran plática el “toques” roba la palabra; dice que a partir de 1980, con la introducción del digital que reemplaza el sistema electromecánico los trabajadores de conmutadores, han solicitado sistemáticamente que se cumpla con lo pactado en el contrato colectivo de trabajo, que en su cláusula novena dice que la empresa se obliga a otorgar capacitación al trabajador cuando se presenten cambios técnicos significativos en la materia de trabajo.
La actitud de la empresa en un primer momento (como lo señala el “toques”) fue la de prometer que se iniciarían los trámites para que la petición de la capacitación se cumpliera, pero sin que mediara razón alguna y en forma unilateral decidió dar marcha atrás, y redoblar esfuerzos en su postura de concesionar la instalación y mantenimiento del equipo digital a empresas ajenas a TELMEX.
Por lo tanto ante la negativa del derecho a la capacitación que implica la violación del contrato colectivo de trabajo, los empleados de conmutadores, hemos decidido demandar a la empresa ya que esto significa la defensa de nuestros puestos de trabajo, evitando así sumarnos a los millones de trabajadores desempleados.
La tecnología y los trabajadores de TELMEX.
Para entender por qué la necesidad de capacitación para el trabajador de conmutadores, pedimos a los compañeros que nos explicaran el significado del sistema digital y su efecto sobre las condiciones de trabajo.
El compañero Lento Rueda (así conocido entre los trabajadores) se apuntó para explicarnos. Al principio se sacó de onda y exclamó nervioso, “¿me repite la pregunta?”. Otros empleados coreaban con burla “¿me repite la pregunta doctor?”. Ya repuesto del lapsus comentó “El digital expresa la incorporación de la electrónica al servicio telefónico, ocasionando una disminución en el tamaño de los equipos, simplifica las labores y elimina gran cantidad de fallas, dentro de las 3 áreas principales de trabajo, instalaciones, conmutadores y operaciones”.
Para la empresa el digital conlleva la posibilidad de una mayor capacidad de atender la creciente demanda de servicio telefónico y una ampliación en los servicios que puede ofrecer. De esta manera, la nueva tecnología permite a la empresa ampliar sus ganancias (las que como enfáticamente señala el compañero- no esta dispuesta a compartirlas con sus trabajadores).
El mismo trabajador comentaba que uno de los abogados de la empresa les reclamaba su actitud de rechazo al sistema digital, ya que afirmaba que la bondad del mismo simplifica al máximo las labores que desempeñan.
“Lo que el abogado no dijo –comentó Lento Rueda- fue que otra de las bondades del sistema digital es el desplazamiento de mano de obra”.
En este sentido el digital representa la probabilidad permanente de quedar desempleado en cualquier momento.
“Nosotros no estamos en contra del sistema digital mi buen, -continuó el señor Rueda- ya que entendemos que el avance tecnológico no se le puede parar, lo que sí repudiamos es el manejo agresivo y torpe de la empresa, que utiliza el nuevo sistema como la espada de Damocles, que pende sobre nuestra cabeza y que en cualquier momento nos puede arrojar a la calle. Estos porque nuestra materia de trabajo es otorgada a empresas contratistas que son propiedad de los accionistas mayoritarios de TELMEX”. El digital significa adicionalmente para los trabajadores, entre otras cosas, la imposibilidad de obtener incrementos salariales por carecer de la calificación que lo justifique, la nula posibilidad para crear nuevas categorías de trabajo en nuestro departamento al no existir al interior del mismo la materia de trabajo pertinente.
Finalmente, el compa puntualizó que la empresa desdeña el cumulo de experiencia que poseen los trabajadores, los que con una capacitación adecuada podrían realizar la instalación y reparación de los componentes que integran el equipo digital. Esta actitud de la empresa caracteriza los objetivos que rigen la introducción del digital, ya que por una parte ponen manos de trabajadores de toda su confianza a la actividad estratégica de la instalación y mantenimiento del digital. Con esto evita que en el futuro dichas actividades puedan suspenderse conflictos laborales, y por la otra incide en un gran ahorro económico al evitarse el gasto de capacitar a los trabajadores ya que ahora el trabajo capacitado es proporcionado por empresas contratistas.
La sensación del digital en el área de trabajo.
Respecto a este punto, fueron varios los telefonistas que nos dieron su opinión, señalando que actualmente son las operadoras las que resienten los efectos más vigorosos del digital, los que están diseñados para que cada operadora atienda en mayor número de llamadas. Este hecho ha provocado un aumento progresivo del stres psicológico, periodos de tensión nerviosa más prolongados, etc.
Aclararon que los trabajadores de instalación de redes comenzarán a sufrir las consecuencias del digital, en el momento que Telmex realice su proyecto de sustituir el cable coaxial por la fibra óptica, en el tendido de líneas telefónicas. Referente a su relación con el digital el compañero Inocencio Erickson apuntó “hasta el momento la empresa se ha preocupado por evitarnos cualquier contacto con el equipo digital, lo que no significa que dejemos de sufrir los efectos de su introducción en el corto plazo, ya que estamos a punto de sufrir su principal consecuencia: el desempleo. Este hecho daría la oportunidad a la empresa de plantear la desaparición del departamento de conmutadores, jugando lo innecesario por estar conformado de trabajadores no aptos para el manejo del digital.
Ahora con el digital las labores de identificar y diagnosticar y señalar el correctivo en el mantenimiento y reparación del digital es realizado por una computadora, lo que ha reducido al trabajador a una rutina que implica disminuir la capacidad de iniciativa del trabajador, el cual se reduce prácticamente a codificar las señales de la máquina y a realizar el cambio de piezas dañadas de acuerdo a las indicaciones dictadas por la computadora.
En conclusión, el compañero indica que; para ellos la introducción del digital significaba la potencial marginación y frustración del trabajador al no tomárseles en consideración a la hora de decidir cuál sería su participación en el momento de que entren en contacto con el digital (Cabe señalar que los compañeros discuten las opciones al respecto).
Los trabajadores de Telmex plantean una nueva modalidad de lucha: la demanda individual.
Después de cinco años de reiterar su demanda por el acceso a la capacitación a través de las instancias sindicales y al no haber obtenido una respuesta satisfactoria, los trabajadores de conmutadores recurrieron al planteamiento de una demanda individual, haciendo uso de los derechos que se consignan en la Ley Federal del Trabajo, quién en el artículo 376 señala que; “Los trabajadores pueden entablar una demanda con carácter individual, por violación al contrato colectivo de trabajo”, sin que esta acción implique que los trabajadores renuncien o pierdan bajo ningún motivo sus derechos y obligaciones con su organización sindical.
Una vez presentada la demanda individual en la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje Número 5, la misma se declaró incompetente argumentando que los trabajadores de conmutadores demandaban modificación del contrato colectivo de trabajo y del convenio departamental, lo cual es totalmente falso, ya que los trabajadores lo único que reclaman es que la empresa deje de violar el contrato colectivo de que incurre al negarles la capacitación necesaria para el manejo del sistema de telefonía digital.
Al no darse trámite a la demanda recurrieron a su derecho de amparo para protegerse de las burdas maniobras de la suprema corte de justicia, que busca desmoralizar y crear condiciones para que los trabajadores no opongan resistencia a las maniobras que realiza la empresa para introducir el digital.
La respuesta de los trabajadores ha consistido en: un plantón en la ST y PS donde Farell Cubillas se comprometió a agilizar los procedimientos y trámites para darle salida al conflicto por ello planteado, la realización de diversas actividades en su centro de trabajo, que van desde asambleas, plantones en las instalaciones, etc.
Finalmente los trabajadores señalan que el ánimo de esta lucha va en aumento y que tienen la certeza de lo justo de su lucha y que no renunciarán a los derechos que han conquistado.